Ese encuentro ,cara a frente no estaba programado .
De golpe pasearse era una urgencia combinada de manos que atrevían .Se descubrían en los ojos los gritos de emergencia genitales. Una puerta, un gancho salvador, un baño medio muerto , fucsia de paredes .El aliento mezclaba las miradas y las ropas , que se dejaban correr para allegarse; entre costados malabares ,el amor se hizo.
Distante muy distante... la traba cede y una comarca de gentes circula normalmente .
Desembocaba en aquel baño, una ancha escalera cómplice de público .De saludos y asombro ,se despidieron los encontrados; ya eran la multitud con las mismas anónimas ansiedades.