miércoles, 28 de marzo de 2007

AGUARDA...la encontradora




¡Por segunda vez, no puedo escapar!...
Aguarda Luna sentada en medio de un círculo de piedras , repite la frase obsesionadamente. Luego, se va quedando susurro lento.
Alza los ojos invoca, hunde sus manos en la tierra dura, la espanta, clavan sus uñas la pregunta.
Pachamama que a todos nos naciste, partime en dos, estampame entre los sesos la respuesta.
No te envuelvas en lo mudo de tus bocas, te vi dos veces en el charco de las ranas. Repetiste "Búscala tu hija no está muerta".-

Entre sombras de los soles duplicados por la puna, Aguarda se veía como un punto demandante.
Bajó el sombrero con su cabeza hacia la tierra, ni notó que sangraban sus manos.

Como revelación una gota de sangre se separa, toma contorno de labios, pronuncia un laberinto de quejidos y estalla. Asombra a la mujer, la yergue destapa cabeza, oídos. Corazón en mano percibe que será el instante abierto .
La voz ahora se hace ronda, la perturba, la circula.
Ella entiende, sabe que la penetra. Instiga su garganta, se cosquillea en el estómago; como un nudo de piedras entre velas le quema las tripas, las pasa , se anida en su útera. Gorjea …

Tu hija no está muerta...Porque yo tierra, fecunda seminal, y temple; oledora en tus ovarias, la dejo sembrada nuevamente. La tienes trenzada desde mi gorjeo.

Un capullo Aguarda Luna.
Un nudo desparramado sobre la tierra.
Sus manos se separan del hueco horadado, lentamente se acercan a su vientre.

Horas que no mueve , que traen lunas sobre ella .

Un día se levantó reconociendo un lugar desemejante .Su vientre acusaba ensanche, percibía movimiento. Regresaba con respuesta, cargaba montañas de preguntas. Cruzó el charco de las ranas ,donde nadie le habló ya.
Solo las ranas se oían, sabía que de sus nuevas preguntas, ellas, no le podrían contestar.

Pero cuando naciera nuevamente su hija, la bañaría en el charco que la anunció.


por mabel casas



*inspirado por unas pocas líneas que escuché, del inicio de la novela “SANTITOS ,el milagro de esperanza” de María Amparo Escandón(mexicana).Siempre lamento no encontrarme aún con el libro, para conocer los caminos que recorrió la autora en la historia.

*fotografía: Sonja Krenmayr (enlace)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuentera : El tesoro de tus palabras convierten a este cuento en un estilo místico y autóctono de nuestras tierras . Se lee la pureza de la palabra que lo integran . Me encanta .

Paz/

Senén dijo...

Impresionante este escrito. Una sensibilidad profunda, una seguridad mas lejos de la vida, un amor que vuelve rodeado de misterios. Me gustó mucho como trataste el tema.
Saluti tanti
Senén

mabel casas dijo...

paz

guauuuuuuu
me gusta como lo decís!!
casi fue escrito en trance de musas,iba viendo a la mujer y me sentía ella hundiendo las manos en el barro
son esos escritos que sorprenden a una misma con lo que sale....

gracias

mabel casas dijo...

senén

te agradezco,sabiéndote cuentista anto,lo que aprecias de este cuento que quiero enormemente

besos amigo